Samsung ha tenido muchos problemas con el nuevo Galaxy Note 7, debido a que las baterías explotaban lo que hizo que se suspendieran las ventas del smartphone y los usuarios devolvieran los mismos para evitar un problema de salud.
El jefe de la división móvil de Samsung, Koh Dong-jin, se pronunció en el blog de la compañía:
Desde el 1 de septiembre, un total de 35 reclamaciones han sido registradas por los servicios de Samsung. De ellas únicamente 24 unidades, de un millón producidas, están afectadas por el problema de la batería defectuosa.
Como prioridad principal tenemos la seguridad de los clientes, por esto, se han parado las ventas del Galaxy Note 7, ofreciendo el cambio a los clientes que ya se hicieron con uno.
Casi un mes después de esa decisión, los primeros dispositivos de reemplazo con las correcciones apropiadas han sido entregados en los Estados Unidos. Sin duda parecía el final de la dramática historia, pero no.
Ahora un informe de The Wall Street Journal señala que Samsung está investigando otra vez porque usuarios dicen que el Galaxy Note 7 se sobre calienta cuando están realizando llamadas telefónicas.
“En condiciones normales, todos los teléfonos inteligentes pueden experimentar fluctuaciones de temperatura”, dijo Samsung el miércoles en un comunicado para defenderse de este nuevo problema. Pero algunas personas dicen que el teléfono está tan caliente que no se lo pueden colocar en la oreja.
Samsung ya se ha comprometido a cambiar el Galaxy Note 7 de reemplazo a uno de sus usuarios en Corea del Sur, y dicen que van a tratar cada tema de forma individual.
Con el caso de las baterías del Galaxy Note 7 podemos estar ante el error de fabricación más grave que recordamos en un dispositivo móvil. No sólo por el hecho de suministrar baterías defectuosas a la escala a la que se ha producido sino por tener riesgo, no de mal funcionamiento, de combustión.