Huella de carbono: La tecnología aportando a la naturaleza.
Ya no es un secreto que hemos venido abusando de nuestra Madre Tierra, nuestro hogar, explotando sus recursos al punto de necesitar planeta y medio más, para seguir subsistiendo de aquí a un par de décadas. Vivimos con un sistema económico despiadado, altamente consumista, con falta de una real cultura sostenible.
Así, nos empujamos lentamente al despeñadero, porque no hay de dónde sacar ese planeta y medio más para mudarnos de casa. Sin embargo, tecnologías nos dan un atisbo de esperanza, alternativas al alcance de nuestras manos que nos ayudan a entender, experimentar y transformar lo que ocurre. Se trata de las aplicaciones que dan lectura a la Huella de Carbono.
La Huella de Carbono no es más que los gases efecto invernadero (GEI) que el ser humano genera por medio de ciertas actividades que aceleran el calentamiento global. Por ejemplo si nos queremos mover de un punto “A” a un punto “B”, de movemos a pie generamos una huella de carbono muy, pero muy pequeña; en cambio si nos movemos en auto esta huella se exponencia y si esa distancia la hacemos en avión es aún más grande.
Te preguntarás ¿Para qué yo quiero tener un app que mide mi huella de carbono? La respuesta es para quitarnos la venda de los ojos. Tenemos la idea que eso del cambio climático es un tema que deben resolverlo las naciones y organismos internacionales con políticas super sofisticadas, sin saber que si todas las personas hacemos pequeñas acciones los resultados serán superiores a esas políticas. Entonces estas apps nos ayudan a entender el impacto de lo que hacemos de una forma divertida.
Las aplicaciones “Huella de Carbono” analizan nuestros hábitos permitiéndonos conocer nuestro impacto sobre el planeta con dinámicas y a través de retos que de a poco van calando con pequeños giros muy beneficiosos tanto para uno mismo, como para el medio ambiente.
Mientras algunas aplicaciones son gratuitas, hay otras que solicitan donativos a sus proyectos de compensación de carbono, por el daño que uno reporta; otras requieren la adquisición de algún dispositivo externo de medición o tag. Acá te contamos algunas de las aplicaciones que puedes encontrar tanto en Google Play como en AppStore.
Con una interfase amigable y visualmente atractiva, JouleBug presenta mediciones que nos permiten ver de forma sencilla el aporte que hacemos con un actuar más ecológico. Además, hay algo importante que decir: es gratis.
Lo mejor de esta aplicación es que muestra de forma detallada cuál es el impacto que tienen, tanto en el ambiente como en nuestros bolsillos, todas esas actividades personales que hacemos diariamente. Así también muestra estrategias simples que reducen dicho impacto.
Pormenores que dejemos de hacer, como mantener el computador en “standby”, ahorra consumo de energía y, por tanto, un par de dólares al año; así es posible percibir monetización con pequeños cambios. Aparte, algo sobresaliente del app, es que podemos competir entre amigos, de modo que grupos cada vez más grandes aportan a reducir más la huella de carbono sobre el planeta.
Una aplicación que además de estimar nuestras emisiones de carbono, nos habilita como usuarios a reducir y balancear la huella de carbono personal. Funciona así:
Actualmente los proyectos disponibles son: la Conservación de Bosques Americanos por medio de siembra de árboles y el manejo de silvicultura sostenible; Plantación de Árboles en Panamá, bajo certificación FSC; y el Desarrollo de Energía Renovables por medio de turbinas en Taiwán. Cada proyecto tiene un valor de venta en dólares americanos, por cada 100 kg de CO2 generado (USD/100kg CO2).
También instruye al usuario con información actualizada sobre cómo compensar carbono, reducir emisiones de medios de transporte, entre otros temas ligados a la huella de carbono en general.
Esta aplicación, requiere la adquisición de un tag. Este tag, es un sensor no invasivo fácilmente instalable en el case del teléfono; su objetivo es dar lectura a la contaminación y humedad de aire en tiempo real donde te encuentres, ya sea estés haciendo tu rutina diaria de running, de camino al trabajo o escuela, o estés dando un paseo por el parque. También monitorea el kilometraje del recorrido midiendo el ahorro de CO2 según el medio de transporte que utilices.
Personalmente no pude probar esta app, pues tengo pendiente la compra del tag, cuyo precio ronda los USD 50.00 + cargos por envío e impuestos por importación. Como estudio, se originó en Inglaterra, pero entre más nos sumemos a la medición de la contaminación del aire, mejores respuestas podremos dar al problema.
Y si no quieres ocupar memoria en tu dispositivo móvil, desde tu escritorio puedes entrar y registrarte en la página de la iniciativa CeroCO2, donde introduces datos para calcular tus emisiones sea por viajes aéreos/terrestres, alimentación y uso de energía. Basado en estos datos, también es posible compensar la carga de carbono por medio de donaciones a proyectos como la conservación del Amazonas del Perú, el apoyo a pequeñas hidroeléctricas en China, la reforestación en Nicaragua y la mejora de agricultura orgánica en Guatemala. Cabe destacar que la iniciativa CeroCO2 ha sido premiada como el mejor proyecto de reducción de emisiones, siendo iniciativa de la ONG ECODES.
Verás que algunas aplicaciones te colocan como lector de contaminantes, de modo que ayudas al estudio de cambios en la atmósfera a la vez que conoces tu incidencia en tiempo real, lo que es muy valioso; otras, se limitan a estimaciones, siempre basados en tu actividad. Unas más atractivas, otras más prácticas, pero todas nos muestran nuevas formas de cómo ayudar a reducir nuestro impacto negativo sobre el planeta, lo que hace que la mejor aplicación sea nuestra nueva actitud y nuevos hábitos para hacer un cambio positivo en nuestro hogar: El Planeta Tierra.
¿Qué esperas? Elige una. El cambio que necesitamos está en nosotros… está en ti.
POR: Melissa Martinez